El sol. Ha salido el sol. Porque ya le tocaba. Es su turno. Turno de buen tiempo, de playas, de piscinas, de vacaciones, de descanso, de helados, de chanclas y bañadores, de gafas de sol, de vestidos cortos, de ponerse morenos, de canción del verano, de adiós a las clases, de aire acondicionado, de estar, y ya está.
Es tiempo de risas, de planes descabellados, pensados en 2 min, que son más que suficiente.
De: Te vienes?- Vale.
De: A donde vamos? - A donde sea.
Es el renacimiento del cuerpo, de la mente. Dirás: 3 meses pueden cambiar tanto? Pueden, y más.
Suena ese cambio como malo, pero para nada.
Y luego el reencuentro, con todo, tu rutina, personas...
Porque es necesario echarse de menos
Porque es necesario queres volver
Porque es bonito pensar en despues.
Porque el después se convierte en un ahora.
Y porque quizás ahora no es nada.
Pero si nada es para siempre.
Yo quiero ser tu nada.
El sol ha salido para vernos. Nos saluda. Y nos da la bienvenida. La bienvenida al verano, que ya ha empezado.
Feliz verano.