lunes, 21 de febrero de 2011

Imanes

Los imanes tienen la atracción como principal característica. Es de sabiduría científica y popular que los polos opuestos se atraen. Eso pasa cuando un imán positivo y uno negativo se atraen mutuamente.
Fijaros bien que he escrito: "mutuamente", ya que es de crucial importancia.
¿Que pasa cuando no es así?
Si, que pasa cuando un imán es atraído por, digamos, un metal? Cuando solo existe la atracción de un polo. Ese imán, se pega a la perfección al metal, es decir, las leyes de la ciencia lo explican. Pero mientras que este otorga su característica principal, el metal no actúa para nada. Se queda ahí, con el imán pegado. Y no parece que le moleste, pero, ¿es justo para el imán que es quien sostiene esa pequeña conexión? ÉL es quien está cargando con todo el peso. Y también quiere sentirse correspondido, que esa atracción que proporciona, le sea devuelta.
A veces pienso que los metales son solo imanes ocultos. Imanes que hacen creer que no tienen carga, positiva ni negativa. Creo que es porque tienen miedo. O que no saben cual es su verdadera carga.
Entonces, metales del mundo escuchar, buscar la vuestra, porque seguro que tenéis algún imán pegado, que desea ser correspondido.

2 comentarios:

  1. Lo lei y una fina hebra de mi cuerpo fue tocada. Creo que la fuerza de atraccion me hizo llegar aca! ... gracias

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  2. ¿y qué pasa cuando sólo quieres engancharte en ESE imán? eh eh eh.

    bonita :)

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besitos con sabor a lacasitos